Un salto transatlántico

Tras forjar su camino en Marcet y en diversos equipos, Joan Bauza se embarca en la búsqueda de su sueño americano: completar su beca y perseguir la oportunidad de jugar en Estados Unidos.

Desde su tierra natal en Mallorca hasta los campos universitarios de Estados Unidos, Joan Bauza ha recorrido un camino lleno de desafíos, superaciones y una pasión inquebrantable por el fútbol. Sus recuerdos de su estancia en Marcet junto a su hermano Rafa, su actualidad en la Converse University de Carolina del Sur y su visión optimista del futuro.

Joan jugó en diversos equipos regionales, tanto en su pueblo natal de Cardassar como en otros lugares de Mallorca, hasta que en 2015 comenzó su camino en Marcet. “Los conocí cuando realizaron un campus en mi ciudad. Me interesó y asistí a otros tres que organizaron, y fue allí donde decidimos ir mi hermano y yo”, recuerda el futbolista.

“Marcet me brindó un gran apoyo, especialmente en términos de técnica, ya que me enseñaron conceptos que desconocía. No solo se centraron en el aspecto futbolístico, sino que también se preocuparon por mi desarrollo psicológico, brindándome clases y motivación“, recuerda con gratitud el mallorquín. Y agrega: “La experiencia en sí me ha ayudado a crecer enormemente tanto como jugador como persona“.

Durante su tiempo en Marcet, tuvo la oportunidad de enfrentarse a equipos profesionales de renombre y participar en torneos internacionales. Joan recuerda especialmente uno en Francia, en el que su equipo se consagró campeón, dejando una marca imborrable en su carrera.

“Marcet me ha ayudado a crecer enormemente tanto como jugador como persona”

Después de su etapa en Marcet, Joan Bauza continuó su trayectoria en el fútbol español, jugando para equipos como el Atlético Baleares, San Andreu y Badalona. Sin embargo, una oportunidad única se presentó en su camino: “Fue mi madre quien me informó sobre la oferta de una beca en Estados Unidos. Recuerdo que estaba en clase y me puse muy contento”, se sinceró.

Joan se encuentra disfrutando de su segundo año universitario, donde estudia y juega en la División II de la NCAA. “Lo que más me gusta es que tenemos un sistema similar al de Marcet. Nos levantamos temprano, entrenamos, asistimos a clases y luego volvemos a entrenar. El nivel me ha sorprendido gratamente y el trato que recibimos como jugadores es excepcional, casi profesional”, afirma entusiasmado.

En este momento, Joan está enfocado en completar sus estudios y su beca en Estados Unidos. Sin embargo, no evade la pregunta sobre su futuro deportivo y lo tiene claro: “Al terminar la liga universitaria, si existe la posibilidad de jugar profesionalmente en Estados Unidos, sería perfecto. De lo contrario, siempre está la opción de regresar a España y dar lo mejor de mí cada día”. Y concluye: “Ya veremos dónde nos pone el futuro“.