Este sitio Web utiliza cookies propias para permitir una navegación segura y adaptar el contenido del sitio web. También se usan cookies de terceros para analizar la navegación de los usuarios. No usamos cookies de personalización ni de publicidad. Puede configurar qué tipo de Cookies desea aceptar desde el panel de configuración. Para más información, por favor, visite nuestra Política de Cookies.
Marcet clausura el Calderón con Nuevas Tecnologías
{mb_sdlf_jugador_SDLF-jugador_frase-destacada}El Departamento de Nuevas Tecnologías presenta sus últimas tres propuestas en un evento organizado por el rey de España.
Es la última vez en la historia que se va a hacer fútbol dentro del estadio Vicente Calderón. Más de medio siglo de fútbol y gloria nos contemplan. La que fuera la casa del Atlético de Madrid se despidió el pasado fin de semana del deporte rey lanzando una mirada a las innovaciones que el futuro le depara. La Fundación Cotec –presidida por el rey de España, Felipe VI– fue la encargada de organizar el evento y, como no podía ser de otra manera, invitó a Marcet a exponer las últimas propuestas en nuevas tecnologías para la formación en el fútbol.
Así lo contamos en directo desde Instagram, @marcetfootball:
No toda la oferta de Nuevas Tecnologías llegó a la capital española. Franco Sanchírico, líder de la expedición y director del departamento Marcet de Nuevas Tecnologías, explica que, “cuando se trata de mostrar algo en un tiempo reducido y siempre sobre el campo, es necesario escoger cuidadosamente lo que vas a enseñar. No se trata de exhibir el elemento en sí, sino todo el espíritu innovador que hay detrás de una institución como la nuestra”.
De entre todas las tecnologías que se podían trasladar de una ciudad a otra se escogieron tres. “Concluimos que eran las mejores opciones, ya que simbolizan tres aspectos importantes de Marcet: trabajar sobre datos, implementar las nuevas tecnologías al campo de juego y entrenar un fútbol que se juega con la cabeza”
El Free-Kick Instant Analysis (Análisis instantáneo del tiro libre), responde a la primera cuestión. Gracias al uso de un balón inteligente, vinculado a una tableta, se pueden registrar datos individualizados del tirador, tales como trayectoria del lanzamiento, fuerza impresa en el tiro, velocidad o rotación. Todo acompañado de la grabación del propio tiro, que sirve a los profesores para mostrar, al instante, los aciertos y los errores posturales que han tenido como consecuencia los datos registrados. El propio jugador, a medida que va realizando nuevos tiros libres, puede comprobar su progresión en cuestión de segundos.
Por su parte, las Reaction Goals (porterías de reacción) son un ejemplo claro de implementación del entreno a situaciones reales de juego. Se trata de varias pequeñas porterías cuyos postes son luces LED (en el caso del Vicente Calderón, sólo se trasladaron dos). El entrenador controla mediante control remoto qué portería se enciende y en qué momento. Gracias a este simple –pero efectivo– recurso, la variable de finalización es un misterio para el jugador hasta que el profesor lo considera oportuno, de tal manera que obliga al futbolista a estar atento a todas las variables posibles.
Para poder ver y anticipar todo lo que puede ocurrir dentro del terreno de juego, es necesario trabajar la visión periférica y la capacidad del cerebro de prever lo que va a ocurrir antes de que pase. Para eso sirve el Strobe Training (entrenamiento estroboscópico). El jugador se pone unas gafas que ciegan completamente al jugador durante un tiempo determinado, y después le devuelven la vista por una fracción de segundo para luego volver a sumirlo en la oscuridad. Así una y otra vez.
“Ésta es la última novedad que Marcet presenta”, explica Sanchírico. “El hecho de privar al jugador de la visión obliga al cerebro, durante la fracción de segundo que puede ver, a registrar más información en menos tiempo, con el fin de poder anticipar lo que va a ocurrir mientras se mantenga ciego. De este modo, enseñamos a nuestros alumnos a interpretar lo que les rodea para poder predecir el futuro lógico. La posición del cuerpo de un jugador cuando se dirige hacia el balón puede indicarnos dónde acabará el esférico tras golpearlo. Si esto lo combinamos con toda la información que rodea la acción (ubicación de jugadores, velocidad del oponente, etc.) estamos entrenando un proceso de deducción lógica del cerebro que acabará funcionando de manera intuitiva, como en segundo plano. Siempre presente. Tanto fuera como dentro del campo”.