Modelo Pedagógico

El Modelo Pedagógico Marcet Football es un proceso cognitivo basado en la Neurociencia

En Marcet nos aseguramos de que nuestros alumnos alcancen su máximo potencial motivándolos a entender el juego del fútbol en todos sus aspectos y a saber jugar inteligentemente, con capacidad de ver, entender, decidir y ejecutar de manera efectiva y rápida. Pero, ¿cómo llegamos a desarrollar estas habilidades?

El talento no es un regalo de la genética, sino una conquista del esfuerzo.

Para encontrar el talento no debemos buscar al principio, sino al final del proceso. Las habilidades emergen y se desarrollan como consecuencia de exponer las capacidades genéticas (los dones innatos para el fútbol) al entrenamiento, la práctica y el aprendizaje inteligente, teniendo en cuenta lo mucho que influyen los catalizadores -positivos o negativos- que aceleran o inhiben el proceso de adquisición de competencias.

Hay catalizadores externos, como el entorno del jugador, su familia o su país de origen. Y hay catalizadores internos, es decir intrapersonales. Se trata de la conciencia que tiene el alumno de sus fortalezas y debilidades, y de su capacidad de verse a sí mismo con realismo: ¿Quién soy? ¿Cómo soy? ¿Qué quiero? Aquí entran en juego la inteligencia emocional, la actitud positiva, la autoestima y los valores.

Para canalizar todos estos elementos hacia el desarrollo del talento hace falta un modelo pedagógico enfocado en el alumno. Por eso, los profesores de Marcet no enseñan, sino que iluminan al jugador para que llegue a sus propias conclusiones y aprenda por sí mismo. En otras palabras, el alumno tiene que aprender a aprender (metacognición), ya que en su proceso hacia el talento no siempre podrá tener un profesor a su lado. Cualquier acción en la que se implique (partidos, entrenamientos, experiencias vitales) sirve para que sea capaz de progresar en su camino hacia su máximo potencial.

El Método Marcet es un proceso cognitivo basado en la neurociencia y consta de 11 pasos

1. Identificación

Identificar las competencias, conocimientos, actitudes y valores que dentro de 10 años exigirán los directores deportivos y dirigentes de clubes profesionales de las mejores ligas de Europa Occidental para contratarlos. Esta identificación es fruto de un trabajo continuo, por lo que se actualiza constantemente a medida que se identifican cambios sustanciales en la realidad investigada.

2. Ponderación

Determinamos para cada una de las competencias, conocimientos, capacidades y valores identificados un peso específico en relación a la especialidad y posición en el campo de cada jugador.

3. Desglose

Para facilitar el aprendizaje y la evaluación, las competencias, conocimientos y valores identificados se desglosan y diseccionan en comportamientos muy concretos y detallados, de tal manera que el profesor y el evaluador solo tienen que verificar si el alumno hace algo o no y en qué grado de intensidad (nunca, a veces, a menudo y siempre).

4. Evaluación Matrix inicial

Evaluación Matrix inicial que determina la situación y nivel real del jugador en cada una de las competencias, conocimientos, aptitudes y valores en su proceso de aprendizaje.

5. Determinación de objetivos personalizados

Determinación de objetivos personalizados para cada jugador, decidiendo conjuntamente (alumno-profesor) qué competencias, conocimientos, habilidades y valores queremos mejorar y adquirir para cada alumno concreto.

6. Estrategias de aprendizaje personalizadas

Cómo y cuándo conseguir que el alumno alcance los objetivos fijados. Programamos acciones formativas concretas y un plazo determinado.

7. Acción

Se pone en práctica la estrategia a través de ejercicios, juegos y actividades planificadas.

8. Reacción

Evaluamos conjuntamente (profesor-alumno) los errores que se producen durante la acción para repetirla (reacción) con las correcciones adecuadas a las que los jugadores han llegado por sus propias conclusiones. Por lo tanto actúan por convicción, no por instrucción. Los profesores Marcet solo inducen e iluminan. Si constatamos que no conseguimos que los alumnos alcancen los objetivos pretendidos, cambiaremos inmediatamente, y tantas veces como sea necesario, las estrategias adoptadas por otras nuevas para adaptarse al proceso cognitivo de cada alumno específico.

9. Evaluación Matrix

Una vez finalizado el plazo para alcanzar un objetivo, se evalúa al alumno para ver en qué grado lo ha conseguido. Cuando el resultado es satisfactorio, pasamos a establecer nuevos objetivos.

10. Visualizar el resultado

Con la evaluación Matrix, los jugadores son conscientes de que están adquiriendo nuevos conocimientos y habilidades, motivándoles así a seguir aprendiendo con entusiasmo, perseverancia y actitud positiva. Visualizan, con claridad, el resultado de su esfuerzo.

11. Determinación de nuevos objetivos

Profesor y jugador establecen continuamente nuevos retos y objetivos que el alumno debe alcanzar. El proceso se repite en cada acción formadora. Es el círculo de la excelencia.