Modelo pedagógico
El Modelo Pedagógico de Marcet Football es un proceso cognitivo basado en la Neurociencia
En Marcet conseguimos que nuestros alumnos alcancen su máximo potencial, inspirándoles para que lleguen a entender el juego del fútbol y sepan jugar de forma inteligente, con capacidad de ver, entender, decidir y ejecutar bien y rápido. ¿Pero cómo llegamos a desarrollar estas habilidades?
“El talento no es un regalo de la genética, sino una conquista del esfuerzo.”
Para encontrar el talento no debemos buscar al principio, sino al final del proceso. Las habilidades emergen y se desarrollan como consecuencia de exponer las capacidades genéticas (los dones innatos para el fútbol) al entrenamiento, la práctica y el aprendizaje inteligente, teniendo en cuenta lo mucho que influyen los catalizadores -positivos o negativos- que aceleran o inhiben el proceso de adquisición de competencias.
Hay catalizadores externos, como el entorno del jugador, su familia o su país de origen. Y hay catalizadores internos, es decir intrapersonales. Se trata de la conciencia que tiene el alumno de sus fortalezas y debilidades, y de su capacidad de verse a sí mismo con realismo: ¿Quién soy? ¿Cómo soy? ¿Qué quiero? Aquí entran en juego la inteligencia emocional, la actitud positiva, la autoestima y los valores.
Para canalizar todos estos elementos hacia el desarrollo del talento hace falta un modelo pedagógico enfocado en el alumno. Por eso, los profesores de Marcet no enseñan, sino que iluminan al jugador para que llegue a sus propias conclusiones y aprenda por sí mismo. En otras palabras, el alumno tiene que aprender a aprender (metacognición), ya que en su proceso hacia el talento no siempre podrá tener un profesor a su lado. Cualquier acción en la que se implique (partidos, entrenamientos, experiencias vitales) sirve para que sea capaz de progresar en su camino hacia su máximo potencial.